martes, 23 de noviembre de 2010

Antecedentes de las primeras películas mexicanas

En 1906 surgió un grupo de aficionados en Orizaba que filmó El Lunes del valedor , sin embargo, hasta 1910 no existe un registro fidedigno al respecto. En ese mismo año, Felipe de Jesús Haro financió la película Grito de Dolores ; el mismo personifico al padre Hidalgo y confió la fotografía a los hermanos Alva. La cinta se rodó en el pueblo de Dolores. Éste fue realmente el inicio del cine mexicano silente.

A partir de entonces el cine alcanzó un gran auge pues se producían hasta 10 películas en un año, aunque en las épocas de crisis no se producía ninguna, por lo que la actividad fue intermitente y los resultados modestos.

Los primeros estudios los instalaron los hermanos Carlos y Jorge Stahl en la calle de la República del Salvador. También se instalaron otros en la Avenida Juárez, frente al Jardín Solidaridad lugar donde esta hoy el desaparecido Hotel Regis, los de Camus, los Bautista y los Nacional, de Jesús H. Abita, en el Paseo de la Reforma cerca de Chapultepec, en la ciudad de México.

México Lux fue la primera empresa que filmó largometrajes. Estimuladas por la novedad, proliferaron tambien las compañías productoras, que para la realización de las películas recurrían a la novelística nacional (como el caso de Santa de Federico Gamboa, entre otras) y a la literatura iberoamericana (como María, de Jorge Isaacs); a los héroes, por ejemplo a Cuauhtémoc, y a los melodramas urbanos, históricos y rurales.
Fragmento de Santa en 1931

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